La estrategia de contacto de cada uno de los individuos es sumamente compleja; ¿serán capaces de recibir y aceptar los mensajes?
72 horas para la cuenta atrás, (18)
Finalizada la selección de todos los individuos con destino a la Cumbre, hay que diseñar el método de contacto para convencerles del peligro que les acecha y de que tienen que emprender un gran viaje para prestar ayuda en un lugar remoto, desconocido, fuera de su dimensión y todo en menos de 72 horas. La estrategia es compleja.
Si bien han sido seleccionados por unas características muy determinadas y se les supone preparados para tal misión, la dificultad radica en que hay que motivarles, persuadirles de la urgencia de abrir su conciencia y prestarse a un experimento inédito en estas circunstancias. Hay que conectar con su supraconciencia, -¡que la tienen, aunque lo ignoran!-, para hacerles llegar el mensaje claro, conciso, apremiante.
Existe un mecanismo por el cual los de Arriba suelen conectar con los de Abajo para mandarles mensajes subliminales. Solo algunos privilegiados conocen esa función de conexión con los Mundos Superiores y la utilizan a través de estados meditativos profundos, - de ahí la importancia de la presencia del Grupo de Meditadores profesionales-, estos individuos son conscientes de recibir instrucciones de las Altas Esferas; saben que existen campos morfogenéticos de conciencia encargados de vehicular información, “bajarla o canalizarla” como suelen decir, pero como son un colectivo bastante minoritario respecto a los que se cuestionan poco más allá de la realidad aparente, se sienten bastante solos, son tildados de “raritos”, y ahora se trata de motivar a todos los sujetos de la lista, y no resulta tan evidente.
Proponen utilizar los sueños para comunicarles la catástrofe inminente y la necesidad de buscar entre todos una solución, pero hay quienes aseguran que no sueñan; en realidad el mecanismo del sueño es inherente a la condición humana, pero son incapaces de recordar esos viajes al mundo de Morfeo a causa de múltiples factores que desequilibran sus psiques, que les alteran: el estrés, el exceso de información inútil que almacenan, o estar obnubilados por pantallas interactivas que piensan por ellos. Así que primero hay que inducirles específicamente a un estado de calma y reducir la actividad eléctrica de su sistema cerebral para que puedan entrar en un estado meditativo de ondas Alfa, para pasar a Delta y captar, recordar los mensajes que se les transmiten, y debe hacerse al unísono, en el mismo momento para que la interacción astral funcione.
Es todo un proceso que ahora tienen que preparar. El Grupo YD9 regresa a la Cumbre para recibir apoyo de todos los Operadores y elaborar una estrategia de asalto… pero ahora al mundo onírico de los 12 escogidos para subir a la Cumbre.
P.s. Uno de los grandes inventores Abajo, Nikola Tesla pronunció esta frase muy certera: “Mi cerebro solo es un receptor. En el universo hay un núcleo a partir del cual recibimos fuerza, inspiración y conocimiento. No he penetrado en los secretos de este núcleo, pero sé que existe.”
Tesla hubiese contribuido eficazmente, seguro, a resolver el problema acuciante de la Gran Desconexión, pero lejos del sistema de Abajo, se encuentra actualmente en la Región de los Arquetipos del Pensamiento diseñando nuevas fórmulas e invenciones para próximas encarnaciones y ahora mismo resulta imposible contactarlo.
